La Hermandad de la Santísima Cruz de Gandia organizó una Peregrinación a Roma y a la Santa Sede con motivo del Año Santo Calasancio, ya que este año se celebran los 400 años del nacimiento de las Escuelas Pías como Congregación Religiosa, creada por San José de Calasanz, y ambas Hermandades tienen la Sede Canónica en la Iglesia de las Escuelas Pías de Gandia.
En la Peregrinación participaron 44 cofrades y amigos de la Hermandad que visitaron la ciudad de Roma y El Vaticano desde el viernes 29 de septiembre al lunes 2 de octubre.
El primer lugar en visitar fue la Iglesia de San Pantaleón, actual Casa General de los Escolapios en Roma, donde fueron recibidos por el Padre Francesc Mulet, antiguo consiliario de la Hermandad, y el cual explicó la vida de San José de Calasanz y la historia del primer colegio de las Escuelas Pías y de la Iglesia de San Pantaleón. Seguidamente visitaron la habitación donde San José de Calasanz pasó los últimos años hasta que falleció, así como la sala de las reliquias y el Oratorio de San José de Calasanz, en la que sucedieron los acontecimientos más importantes de la Orden de las Escuelas Pías, incluido la lectura del edicto del Papa para la fundación de la Congregación Religiosa.
Al finalizar la visita tuvo lugar la Eucaristía central de la Peregrinación, donde el Padre Mulet tuvo unas palabras de recuerdo y cariño hacia la ciudad de Gandia y las Hermandades pertenecientes a las Escuelas Pías, animándolas a seguir en su tarea evangelizadora, especialmente con los más jóvenes como hacía San José de Calasanz.
Al finalizar la Eucaristía los cofrades que participaron en la Peregrinación se acercaron a la cripta, donde pudieron meditar junto a la tumba de San José de Calasanz y ofrecer sus oraciones al santo.
A lo largo de la Peregrinación por la Ciudad de Roma visitaron los monumentos más emblemáticos de la ciudad como el Coliseo, el Panteón, La Fontana de Trevi, el foro Romano y otros monumentos de la ciudad eterna.
En el recorrido también pudieron conocer diferentes espacios importantes en este Año Santo Calasancio como el barrio del Trastevere donde San José de Calasanz encontró su vocación al ver a los niños pobres que no recibían ningún tipo de educación y pronunció: «He encontrado en Roma el mejor modo de servir a Dios, ayudando a estos pobres muchachos: no lo dejaría por nada del mundo», y dedicó toda su vida al servicio de la educación de los más pequeños a través de la evangelización bajo el lema "Piedad y Letras". Otro lugar importante fue la visita a la Casa General de las Madres Escolapias, donde pudieron ver el museo del Instituto y conocer la vida y obra de Santa Paula Montal, quien siguiendo el ejemplo de San José de Calasanz, dedicó su vida a la educación, educando a las niñas pobres y promocionando a la mujer.
La Peregrinación finalizó en la Santa Sede donde los cofrades pudieron conocer de cerca los Museos Vaticanos, la plaza y la Basílica de San Pedro, finalizando con la subida a su cúpula, desde donde se pudieron divisar unas magníficas vistas de Roma.
La Hermandad está muy satisfecha con esta Peregrinación, ya que durante el viaje se ha creado Hermandad entre sus cofrades y se han vivido momentos, no solo culturales, si no de oración y de compartir la fe, tarea muy importante en la misión de evangelización de toda Hermandad.